Las marionetas son un juego divertido y entretenido que enamora a niños y mayores por igual. Además de ser un juego bastante entretenido, puede ser utilizado como herramienta didáctica. Vamos a explicar por qué los niños adoran las marionetas y cómo puedes utilizarlas para potenciar su aprendizaje.
El primer punto que les llamará la atención es saber que estas han ido pasando de generación en generación. Si bien es cierto que siempre han estado de moda, ahora parece que vuelven con más fuerza que nunca. El calor y el verano hace que los niños dejen a un lado la tecnología y se centren en juguetes más tradicionales. Dentro de estos, las marionetas son fácilmente transportables y proporcionan muchísimos beneficios.
Motivos por los que los niños adoran las marionetas
¿Tus niños adoran las marionetas? ¿Has notado que se divierten mucho con ellas? Tanto las marionetas como los títeres son muy utilizadas como recursos educativos precisamente porque los niños adoran las marionetas. Les prestan atención y siempre están buscando nuevas aventuras.
- Les encantan porque les permite aprender jugando. Hacer el aprendizaje divertido es una de las mejores formas de potenciar su aprendizaje. Además, con las marionetas crean y escuchan historias que les ayudan a ampliar vocabulario. También desarrollan la memoria y la lógica.
- Les ayuda a potenciar su lado más emocional. Jugar con marionetas es una buena manera de ayudar a que los niños y niñas expresen mucho mejor sus sentimientos y sensaciones. Esto se debe a que se sienten seguros bajo la apariencia de “otra persona”. Por ello, consiguen empatizar mejor.
- Los niños adoran las marionetas porque les permite desarrollar y potenciar al máximo su creatividad e imaginación. Se inventan situaciones y crean historias y momentos.
- Las marionetas educan en valores y eso es algo muy importante. Aprenden sobre tolerancia, bondad, generosidad… Los valores que inculcan son realmente positivos.
Además, este tipo de juguete es muy versátil y se puede adaptar, tanto en un ambiente más de juego como en otro más educativo.
