Los juguetes son una de las mejores formas para potenciar diversas facetas de los niños mientras se divierten. Una de estas partes más importantes y que antes hay que empezar a desarrollar es la motricidad gruesa. Vamos a contaros qué juguetes ayudan a estimular la psicomotricidad. ¡A los peques les encanta!
La motricidad gruesa es la que implica grandes grupos musculares. Es importante empezar a desarrollarla pronto, ya que engloba los músculos que primero comienzan a usar. Esto hará que sea más sencillo enseñarles a moverse. La motricidad gruesa engloba las piernas, los brazos, la espalda, el abdomen y la cabeza.
Juguetes para favorecer la psicomotricidad gruesa
La psicomotricidad tiene mucha importancia en la educación de los niños y niñas. Esto les aporta independencia en su desarrollo. Además, les hará sentirse más seguros, confiados y listos para el mundo exterior.
Tu hijo aprenderá a dominar mejor los movimientos corporales. Además, sentirás que tiene una mayor soltura a la hora de moverse. Se verá capaz de explorar nuevos ámbitos y aprenderá a superarse, por lo que se sentirá contento y animado. Mejorará su concentración, la creatividad y la atención. Todo esto hará que pierda el miedo y se sienta mucho mejor. Aprenderá a manifestar sentimientos como la alegría o el entusiasmo.
Cuando los niños son todavía pequeños, entre los 12 meses y los 2 años, los arrastres son juguetes esenciales. Además, las bicicletas de madera (o triciclos) también son una perfecta opción, ya que les ayuda a conseguir estabilidad y equilibrio.
Según se van haciendo más mayores, la bicicleta de madera es perfecta, pero también pueden utilizar saltadores, jugar al balón, al escondite… Todo aquello que implique movimiento directo de todo el cuerpo. A medida que van creciendo, podemos aportarles movimientos y juegos de mayor complejidad. Todos estos ayudarán a la mejora de su psicomotricidad, por lo que tu hijo o hija se moverá con mayor independencia, soltura y elegancia.